Raquel empezó un negocio de consultoría financiera y contable. Montó una oficina y contrató una asistente. A las pocas semanas de arrancar tuvo que paralizar todo. El gobierno de su país tomó varias medidas contra la pandemia. Una de ellas, aislamiento sin plazo determinado. Raquel intenta llevar su negocio al mundo virtual y ahora mismo se encuentra desarrollando un plan de marketing que le permita acercarse a sus nuevos clientes potenciales. En el camino tuvo que cambiar su modelo de negocio.
La pandemia de enfermedad por coronavirus tomó por sorpresa a la mayoría de responsables de gobiernos y personas en el mundo. Las medidas detuvieron las actividades económicas paralizando muchos sectores productivos. Ante el inminente escenario aumenta la incertidumbre y emergen varias preguntas. Una de ellas es ¿qué hacer frente a una probable complicación de la economía global?. Debemos aclarar que no existen recetas, ni fórmulas mágicas, y todos los escenarios que se plantean en los grandes medios, son solo eso, escenarios que dependen de tantos factores que en la práctica es imposible conocer qué sucederá con la economía y la empresa.
Sin embargo, hemos hecho una corta lista de ideas concretas que podrían ayudar a plantear estrategias frente a la alta incertidumbre del momento.
Trabaja sobre lo que controlas. Es un principio siempre útil que hoy se convierte en cardinal para la supervivencia de los negocios. No hagas esfuerzos sobre elementos sobre los que no tienes control. Lamentablemente no podemos cambiar el contexto, la situación excede a las acciones individuales, si bien podemos aportar, no podemos cambiar la pandemia menos, sus consecuencias.
Desarrolla nuevos modelos de negocio. Algo que puedes controlar es tu modelo de negocio. Es una excelente oportunidad para innovar en valor. Es decir, en ofrecer algo que sea útil, que resuelva un problema nuevo o resuelva un problema de formas nuevas. Es el momento de replantear muchos de los supuestos sobre los que opera tu negocio.
Nuevos mercados. Las necesidades humanas seguirán ahí, es decir, la búsqueda de productos y servicios que satisfagan estas necesidades siempre serán parte de la conducta humana. Así que quizá es buena idea buscar nuevos segmentos o nichos de mercado a los cuales atender, es momento de abrir los ojos de tal forma que puedas explorar nuevas oportunidades. Mercados que no has explorado antes, clientes nuevos, expansiones territoriales, etc.
Canales de distribución innovadores. Es hora de explotar al máximo las ventajas que provee la tecnología. No se trata de crear páginas en redes sociales solamente, se puede utilizar la tecnología para mejorar: relación con clientes, información, proceso de venta, incluso, adaptar tus servicios para brindarlos en canales digitales o pasar a estrategias omnicanal.
Afila la sierra. Es uno de los principios que tomamos del famoso libro de Stephen Covey Todo quiebre, y este sin duda lo es, permite tomar consciencia de nuevas oportunidades. Estas oportunidades también pueden presentarse en tus propias competencias. Quizá es un buen momento para prepararse para el futuro. ¿Nuevas soft skills? ¿Nuevas habilidades? ¿Nuevos conocimientos? aprovecha los abundantes recursos gratuitos que existen para afilar la sierra mientras pasa el aislamiento.
Finalmente, esta es la oportunidad de tomar el sartén por el mango y trabajar sobre lo que controlas frente a un escenario de alta incertidumbre.
