Autor invitado de Mary R. Miller
Reproducido con autorización de Bob Tiede
Traducción Business Coaching School
Los mejores coaches hacen preguntas poderosas y luego escuchan realmente las respuestas.
Las preguntas son una herramienta que los coaches y los líderes utilizan para ayudar a los demás a navegar por el duro terreno de la vida. Ayudan a las personas a discernir y descifrar sus próximos pasos. Las preguntas aportan claridad al iluminar el camino y exponer la mentalidad de uno, pregunta a pregunta.
He aquí cinco de las preguntas más poderosas que he formulado. ¿Cómo sé que son preguntas poderosas? Por las respuestas de mis clientes. Lo que todo coach quiere oír: un breve silencio y a continuación, el cliente diciendo: «Esa es una gran pregunta».
1. ¿Qué está dispuesto a cambiar para alcanzar su objetivo?
La respuesta a esta pregunta le da una idea de lo motivada que está la persona para cambiar. ¿Cuánto desean alcanzar su meta? Expone las áreas de su vida que quieren proteger. Eso puede ser un camino para desarrollar límites saludables. También pone al descubierto el miedo, que puede hacer surgir la pregunta «qué pasaría si». Por ejemplo, «Si cambio mi mensaje para incluir mi ética», «¿qué pasa si pierdo clientes?». Como puede ver, esta pregunta crea un rico terreno de conversaciones significativas más profundas que promueven el crecimiento.
2. ¿Cuál es el siguiente paso que puede dar hacia sus sueños?
A veces la gente se queda atascada porque los sueños pueden ser tan grandes que se sienten fuera de su alcance. Si la persona descompone su sueño en trozos que sean procesables, no resulta tan abrumador. Entonces pueden procesar su sueño con más detalle, lo que les permite rodearlo. El objetivo de esta pregunta es hacer que su cliente piense y hable de sus sueños para que pueda actuar hacia ellos. Uno de los objetivos del coaching y del liderazgo es ayudar a los demás a progresar.
3. Si pudiera pedirle a su padre/a Dios/ a su mentor cualquier cosa en este momento, ¿qué sería?
Esto es realmente indagar en el núcleo del corazón de una persona. Lo que desean en el fondo. ¿Qué sienten que no pueden controlar? Algo que sólo es capaz de hacer Dios. Cuando una persona responde a esta pregunta, le abre los ojos a lo que anhela en este momento. El deseo de su corazón. Le indica en qué punto se encuentran en este momento.
4. ¿Qué provoca emoción en su interior?
La respuesta a esto es muy reveladora. Le dice un poco sobre cómo está conectado alguien y lo que le apasiona. Cuando no saben la respuesta, eso le indica que pueden estar un poco perdidos en su búsqueda de un propósito y puede que no se conozcan muy bien a sí mismos. En cualquier caso, le da un camino para investigar y ayudarles a encontrar ese fuego.
5. ¿Ha obtenido lo que necesitaba de la sesión de hoy?
Suponiendo que responda que sí, esto anima a la persona a saber por dónde empezar. Esto refuerza su confianza. También hace que la persona reflexione sobre lo que ha aprendido en la sesión de coaching. Esta reflexión reforzará lo que aprendieron, lo que suele motivarlos a ponerlo en práctica.
Si dicen que «no» y que «nada les llama la atención», esto le indica que no saben realmente por dónde empezar. Que necesitan ayuda para dar un paso atrás y acotar y centrarse en uno de sus retos. También les dice a ambos que necesitan recalibrar. A veces significa que usted no es el mejor coach para esa persona o que necesita cambiar su enfoque.
Hay muchas más preguntas poderosas que puede hacer a sus clientes o a su gente, pero estas cinco han ayudado realmente a mis clientes a dar pasos hacia la consecución de sus sueños. Mi esperanza es que pueda añadirlas a su caja de herramientas de liderazgo para hacer crecer a su gente y a usted mismo.
